Gene Kelly no solo fue un talentoso actor, sino que redefinió el género del musical en el cine, fusionando coreografía, dirección y actuación de una manera que pocos han logrado replicar. Con una energía inigualable y un carisma arrollador, Kelly se convirtió en la cara visible de algunos de los musicales más emblemáticos de Hollywood. En esta nota, repasaremos algunas de sus mejores películas, aquellas que no solo marcaron una época, sino que siguen siendo referentes indiscutibles del cine musical.
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1. Singin’ in the Rain (1952)
No se puede hablar de Gene Kelly sin mencionar Singin’ in the Rain, el musical que redefinió el género y se convirtió en un ícono del cine. Esta película no solo celebra la transición del cine mudo al sonoro, sino que lo hace a través de una narrativa ingeniosa, llena de color, música y coreografías que siguen asombrando a generaciones. La famosa escena de Kelly cantando bajo la lluvia es solo la punta del iceberg. El film también nos regala momentos inolvidables como «Good Morning» junto a Debbie Reynolds y Donald O’Connor, y la espectacular performance de «Make ‘Em Laugh», que ha sido homenajeada innumerables veces. Singin’ in the Rain es una oda al cine, una película que nos recuerda por qué amamos este arte y cómo, a través de la música y el baile, se pueden contar historias que trascienden el tiempo.
2. An American in Paris (1951)
Antes de que Singin’ in the Rain hiciera historia, Gene Kelly ya había demostrado su destreza en An American in Paris, bajo la dirección de Vincent Minnelli. Este film es un festín visual y auditivo, donde Kelly interpreta a Jerry, un pintor estadounidense en la bohemia París que se enamora de Lise, interpretada por Leslie Caron. La música de George Gershwin impregna cada escena, pero es en el clímax final, con un ballet de más de 15 minutos, donde la película se convierte en una obra maestra. Inspirado en la pintura impresionista, este segmento fusiona música, danza y arte visual de una manera que pocos filmes han logrado. An American in Paris es más que un musical; es una celebración de la cultura y el arte, y un testimonio del talento inigualable de Kelly
3. The Pirate (1948)
En The Pirate, Gene Kelly une fuerzas con Judy Garland y el director Vincent Minnelli para crear una comedia musical llena de energía y encanto. Aquí, Kelly interpreta a Serafín, un actor de teatro que se hace pasar por un temido pirata para conquistar el corazón de Manuela, una joven obsesionada con el mítico bucanero. La química entre Judy Garland y Kelly es palpable, y su diversión se transmite a la audiencia en cada número musical. La película es un festín de comedia y música, con coreografías audaces y una historia ligera que se disfruta de principio a fin. The Pirate es una joya del cine musical, una propuesta alegre que captura la esencia del género en su máximo esplendor.
4. Brigadoon (1954)
Brigadoon es una película mágica que transporta a la audiencia a un pequeño pueblo escocés que aparece una vez cada cien años. Gene Kelly, como Tommy, y Van Johnson, como Jeff, descubren este misterioso lugar durante un viaje, y es allí donde Tommy se enamora de Fiona, interpretada por Cyd Charisse. La película explora temas de amor eterno y magia, con un guion que mezcla romance y fantasía. El film es un claro ejemplo de cómo los musicales de la época podían transportar a la audiencia a mundos completamente nuevos, donde el tiempo y el espacio se doblan al servicio de una historia de amor inolvidable. Brigadoon sigue siendo una película querida por los amantes del cine musical, inspirando incluso a producciones modernas como la serie Schmigadoon!, que rinde homenaje a este clásico.
5. Hello, Dolly! (1969)
Aunque Gene Kelly es más conocido por su trabajo frente a la cámara, Hello, Dolly! lo vio brillar como director en una época en la que los grandes musicales comenzaban a declinar. Protagonizada por Barbra Streisand, esta película es una oda a los espectáculos teatrales de antaño, llena de extravagancia y números musicales grandiosos. Streisand interpreta a Dolly Levi, una casamentera en busca de amor, y aunque la producción tuvo sus desafíos, el resultado es un film que, a pesar de las críticas mixtas, ha perdurado como un clásico. Kelly, en su rol de director, supo capturar la esencia del género musical, y Hello, Dolly! es un testamento a su habilidad para dirigir con un ojo experto en la espectacularidad y la emoción.
Estas películas no solo destacan el talento de Gene Kelly como actor y bailarín, sino también como un visionario del cine musical, cuyo legado sigue vivo en cada paso de baile, cada nota cantada, y cada película que nos hace soñar.
